Editorial

Presentamos con mucho gozo y alegría el segundo número de El Alemancito en el marco del 50 aniversario del Colegio Alemán de Maracaibo. Nuestro primer número tuvo una acogida muy positiva y damos gracias por ello.

En el mes de la mujer. Fragmentos de la carta a las mujeres

Juan Pablo II

Te doy gracias, mujer, ¡por el hecho mismo de ser mujer! Con la intuición propia de tu femineidad enriqueces la comprensión del mundo y contribuyes a la plena verdad de las relaciones humanas.

A vosotras, mujeres del mundo entero,

os doy mi más cordial saludo:

A cada una de vosotras dirijo esta carta con objeto de compartir y manifestar gratitud, en la proximidad de la IV Conferencia Mundial sobre la Mujer, que tendrá lugar en Pekín el próximo mes de septiembre.

La entrevista del mes

La entrevista del mes es la para la administradora y una de las fundadores del Colegio Alemán de Maracaibo, Margarita Martens de Hauffe. Por Oglenis Vásquez, 5to Año B.

¿Desde cuándo está vinculada al Colegio Alemán de Maracaibo?

Ay mi amor, desde que nací prácticamente, desde que se fundó el Colegio, podría decir que antes de que se fundara. El colegio se fundó en 1967, pero antes de eso ya se estaban dando los rumores, de que el otro Colegio no iba a seguir y  se pusieron unos cuantos alemanes, entre ellos mi esposo y yo. Entonces se dijo que se iba a fundar un colegio alemán, que se quería pues todos teníamos naturalmente hijos pequeños y no sabíamos qué hacer con todos estos muchachitos, y así fue como se formó el Colegio Alemán de Maracaibo.

¿Cómo fue ese primer día en el colegio?, ¿Qué recuerda?

Imagínate, eran 32 niñitos, nosotros empezamos de cero, nosotros no comenzamos como un colegio, iniciamos con 32 padres que nos dieron su apoyo para fundar el preescolar, porque empezamos solo con el preescolar, desde abajo con los chiquiticos, entonces comenzamos con 32, de los cuales sólo 7 eran venezolanos, todos los demás eran alemancitos, con sus padres alemanes por supuesto, comenzamos con las maestras alemanas que teníamos, las cuales ya murieron, con las que emprendimos el preescolar, yo fui una, allí fue donde comencé yo, ayudando en el preescolar.

Antes del Alemán de Maracaibo, hubo dos intentos de instituciones educativas, Alemán del Zulia y el Instituto Venezolano Alemán, ¿Conoció esos dos proyectos?, ¿Guardan relación con nuestro Alemán?

Allí hay una confusión, el Colegio Alemán del Zulia estuvo en el año 1926, que lo obligaron a dejar de seguir por la guerra, la Segunda Guerra Mundial. Ese colegio cerró y no hubo colegio alemán hasta el año 1966, que salió el otro colegio alemán que fue el Alemán del Zulia y ese Instituto Alemán del que todo el mundo habla. Cuando nosotros abrimos nuestro colegio el Instituto Venezolano Alemán existía. Siempre hubo confusión. El Instituto Venezolano Alemán no tuvo nada que ver con nosotros, aunque a veces los bancos nos confundían, hasta que desapareció, este instituto no tenía nada que ver con nosotros, y ese instituto del que todos hablan, solo tenía una profesora que medio daba alemán, pero todos los demás estaban en el Colegio Alemán de Maracaibo.

Qué es los más hermoso que ha vivido en estos 50 años dentro del Colegio?

Muchas cosas, pero mi emoción más grande fue que fuimos abriendo de salón en salón, que cada año íbamos inaugurando un grado más, con los niños que íbamos teniendo, así íbamos abriendo. Fue sin duda un crecimiento progresivo. Lo que más me llenó de emoción fue llegar al bachillerato, y así llegar a nuestra primera graduación en el año 1981. Fue en el Teatro Bellas Artes, debido a que no teníamos mucho espacio para la realización del evento, todavía estábamos en la calle 75, porque aquí, en la sedad actual, estamos  desde hace 25 años. Fue muy emotivo ver a la primera promoción de egresados del Colegio Alemán de Maracaibo, verlos allí en el podio, eso todavía es muy grande para mí. Que hayamos logrado esto, que llegáramos a 5to año y que ya estuviéramos graduando nuestra primera promoción fue un logro muy grande, todavía el recordarlo hace que se me erice la piel de la emoción.

¿Qué significa para usted el colegio?

Significa mucho, porque yo no empecé de una vez aquí sentada, yo hice preescolar, estuve varios años en preescolar, después pasé a la fotocopiadora, en el puesto de Magali, pero este puesto de Magali es lujoso  ahora para cuando yo lo hacía. Eso se hacía en stencil, los maestros tenían que escribir a máquina todo lo que querían, después me lo pasaban a mí, luego yo los pasaba por el papel copia y había un tóner, y que es lo que no me ensuciaba yo las manos… porque uno tenía que pasarlo a mano, por un rodillo y entonces sacarlo con cuidado, a veces el papel se llenaba mucho de tinta, en fin… era un desastre!, era muy tedioso, nada que ver con lo moderno de ahora. Después de ahí pasé a la facturación, allí llevaba toda la contabilidad, el puesto que actualmente tiene Marlene, después poco a poco hasta que llegué aquí, que tengo la responsabilidad de todo el colegio, tanto de los profesores como de todo. Aquí no pasa nada sin que yo no lo sepa, mi responsabilidad se encarga de ver que todo funcione bien. Tengo que ir a ver a veces hasta al campo para verificar que todo esté funcionando como Dios manda. Tú debes verme que, a cada rato, ando paseando, por ejemplo, si a la profesora Isabel le dan un reclamo de cualquier cosa, viene y me lo reporta, porque yo tengo una junta directiva, a la cual debo informarle de todo lo que está pasando.

¿Qué cosa cree Usted le toca asumir al Colegio de cara al futuro? 

Mi futuro ahorita es el preescolar. Estamos abriendo la nueva sede y no lo hemos podido lograr por la situación del país, pero mi ilusión es empezar en septiembre, lo veo todavía muy difícil, pero yo espero lograrlo con todas las fuerzas que yo tuve al principio, creo que las voy a tener ahora otra vez, con el favor de Dios esperemos que sea así. Por eso mismo tenemos pensado ahora hacer un acto en mayo, pensamos hacer unos juego, para ustedes los grandes y los pequeños también, una actividad de sábado familiar, allá en el campo, no con música, ni como acostumbran hacerlo los otros colegios, sino con actividades recreativas, con motivos alemanes, con salchichas y estas cosas, se piensa hacer en mayo, y espero que sea un gran éxito, es mi sueño. Porque este dinero se va usar para terminar el preescolar y la fachada del colegio, que ya se nos está desgastando por los años, ya son los 25 años que tenemos aquí, que fue construido el colegio, para este año tenemos muchas sorpresas para nuestros alumnos y para sus padres también, para la familia, porque es el Colegio Alemán, una gran familia, y los demás colegios lo dicen “qué gran familia son ustedes”, pero es por esto, porque desde un principio me criticaron mucho el “salón de profesores”, porque yo decía que el maestro de preescolar tienen tanto valor como el maestro de secundaria, entonces por eso quiero que los profesores se reúnan ahí, para que compartan ideas, puede que cada quien hablen de sus cosas de primaria o secundaria y hasta preescolar, pero discuten y comparten sus ideas, y esto se logró debido a que hay un “salón de profesores”, en los otros colegios, estos están divididos, por su categoría, pero aquí no, por eso es que yo siempre les digo, si ustedes ven que algo malo, que hace un niño de primaria, usted está en su derecho de regañarlo, igual le digo a los de preescolar, que si ven a un alumno de secundaria haciendo algo malo, ustedes los pueden llamar la atención, porque somos una familia, y como en toda familia a los mayores se les debe respeto y todos nos debemos de respetar.

Finalmente, la Sra. Hauffe, quiso recordar a algunos de los fundadores del proyecto que hoy arriba a sus primeros 50 años.

El Colegio Alemán ha tenido varios presidentes, nuestro primer fue Frank Rippa, el cual lo perdimos en la gran tragedia de “La caída del avión DC-9”, aquí en Maracaibo. De ahí asumió la presidencia mi esposo, quien le siguió fue el señor Hans Mendt, nombre que se le da en su honor al campo deportivo. Nuestro actual presidente, el señor Ernesto Leonardo, esos son nuestros presidentes. 

Don Cecilio Acosta

Paula Acuña

3er Año C

En unas de sus grandes obras “Cosas sabidas y por saberse” (1856), Acosta refleja ideas que son un hilo que unifica todo lo más excelso del pensamiento cívico venezolano. 

Venezuela adolece de memoria cívica. Muy pocas personas en este país, nuestro país, saben quiénes fue Andrés Bello, Juan German Roscio, Fermín Toro o  Juan Vicente González. Sabemos bien quiénes son Chino y Nacho, y no está mal saberlo, pero cómo puede caminar por el mundo un país que no sabe si camina o corre, que no sabe si tiene pies o alas, cómo camina un país que no quiere caminar. Por eso hoy quiero recordar a un caminante que no se cansó de caminar y que sigue caminando aunque nadie lo vea caminar. El caminante es Cecilio Acosta y el año próximo cumple 200 años de su nacimiento.

Crisis existencial de un futuro emigrante

Ricardo Ríos

5to Año A

"Todo el mundo es un genio. Pero si juzgas a un pez por su habilidad para trepar árboles, vivirá toda su vida pensando que es un inútil"

Relatos de la naturaleza (2012) en su página web, nos dice que “Al igual que la raza humana, las hormigas son uno de los pocos animales que viven en sociedad, compartiendo un lugar donde coexisten de forma organizada. La diferencia entre hormigas y humanos es, que aunque no sean inteligentes, ellas sí han logrado formar una sociedad perfecta y armoniosa, cuyo objetivo es el bien común.”. Esta frase me hizo plantearme un escenario que, aunque imposible y un tanto ridículo en este caso, sería interesante de presenciar aun en una hormiga: ¿Qué pasaría si una hormiga en la colonia tiene un pensamiento diferente al de las demás? 

Vacío Existencial

Luis González

5to Año B

“Comprendí entonces que un hombre que no hubiera vivido más que un solo día podía vivir fácilmente cien años en una cárcel”.

Viktor Frankl, fundador de la Logoterapia, define el vacío existencial como la pérdida del sentimiento de que la vida es significativa y que las personas presentan el sentimiento de que sus vidas carecen de total y definitivamente de un sentido. La realización de un sentido de vida se inicia cuando la persona busca actuar en su día a día para cumplir lo anhelado, mientras que el vacío existencial ocurre cuando el individuo no trascienda en su vida cotidiana desechando la idea del proyecto de vida.

Meursault es un personaje sin duda alguna intrigante e incluso desesperante, dentro de El extranjero Camus nos muestra este personaje apático e indolente, desde el inicio de la novela que recibe la noticia de la muerte de su madre Meursault adopta un comportamiento fuera del normal e incluso se molesta que la muerte de su madre sea un inconveniente para él. Durante toda la obra él se muestra indiferente a su vida incluyendo a las decisiones que toma, cosa que resulta un poco perturbador con nuestro sentido de moralidad y nos hace percibir a Meursault como alguien insensible. Meursault es un claro ejemplo del vacío existencial, él experimenta su vida como algo absurdo y carente de sentido. Tal vacío lo lleva por una serie de eventos que una persona dentro de los márgenes que impone la sociedad encontraría atroces pero que él ve con total serenidad y sin mucha importancia. Enfocándonos en situaciones particulares podríamos destacar dentro de la novela cuando Raymond, uno de sus vecinos, lo invita comer y le cuenta la historia acerca de su amante y de cómo él agrede a la amante y dice que quiere castigarla, y Meursault asume esto con total normalidad e incluso se involucra al escribir la carta que Raymond le entregaría Meursault le es indiferente hacerlo o no.

Sin duda alguna algo que encuentro fascinante de Meursault es su comportamiento durante su juicio, que aunque él cuestionara algunas cosas en general se notaba muy despegado e indiferente a lo que decían de él en la corte, como recibe la sentencia de muerte con tal tranquilidad, debo decir me espanta. Aunque a la vez es confuso Meursault ya que muestra su placer por pequeños detalles en su vida tales como sentir el agua del mar; desear a María (su amante) carnalmente; mirar por la ventana de su habitación.

La actitud al final de Meursault expresando su deseo de que el día de su ejecución haya muchos espectadores que le reciban con gritos de odio deja entrever que él en realidad no se siente diferente sino al contrario si los demás claman venganza y pena de muerte para el asesino él también. Definitivamente El extranjero es una obra que cuestiona la moral con su lectura, es una novela pesada en cuanto a su significado y un gran reflejo de la cara del vacío existencial. 

El colegio desde aquí...

Sofía Hauffe

Egrasada. Promoción XXV

El colegio me brindó la oportunidad de descubrir el arte y fue para mí una forma de drenar las emociones y abstraerme del entorno, y por ello estoy sumamente agradecida

En el momento en que se me solicitó escribir los aspectos importantes aprendidos durante mi estadía en El Colegio Alemán se me presentó la mayor incógnita: ¿Qué llevo conmigo de aquellos días? Curiosamente me percaté que en julio de este año, mi Promoción, la XXV, cumple 9 años de graduados, y me di cuenta de que quizás las cosas no pasan por casualidad, que era momento de mirar hacia atrás y ver el camino recorrido, pero sobre todo de contemplar lo aprendido.